Pues ya ven. El movimiento de Pedro Sánchez de convocar elecciones para el 23 de julio ha provocado una ola de calor entre el socialismo gallego y tanto es así que ahora mismo los primeros espadas obligarán a tomar decisiones drásticas como la de un nuevo cambio en la Delegación del Gobierno en Galicia, con la salida de José Ramón Gómez Besteiro, para presentarlo como cabeza de lista por Lugo y el regreso del ministro de Sanidad, Miñones. La cosa, ya ven, tiene su calado porque la idea del PSdG-PSOE no es otra que prepararse, una vez pasado el 23-J, para las autonómicas gallegas. Ahí los de Formoso (actual presidente del la Diputación) lo va a dar todo, ya que quieren que Besteiro sea el cabeza de cartel para rivalizar con Alfonso Rueda para arrebatar la Xunta de Galicia a los populares. Está claro que el actual delegado del Gobierno en Galicia llegó con el objetivo de tener la visibilidad necesaria para aspirar a un puesto relevante, tras haber pasado por una imputación que resultó injusta.
