Una vez conocidos los datos del desempleo no es de extrañar que la mayoría de la población desee ser funcionario o tener una plaza pública. Los jóvenes prefieren pasarse varios años intentando aprobar una oposición a integrarse en el mercado laboral, con independencia de su nivel de estudios. Muchos reducen sus expectativas para entrar. Más de 6,8 millones de personas de entre 18 y 55 años, es decir el 29 por ciento de esa franja de edad, han opositado alguna vez a lo largo de su vida (aunque no siempre con éxito) o lo están haciendo en la actualidad para intentar optar a una plaza pública en España. El 74% de los ciudadanos cree que ser funcionario permite tener una calidad de vida mejor respecto a otros empleos. Más de 5 millones de personas tienen intención de opositar y el interés por hacerlo ha crecido un 10%, al pasar de 2,9 millones de opositores en el último año a más de 5 millones. Pero este interés difiere según la comunidad: Madrid, Islas Baleares, Cataluña, Castilla y León, Murcia y Galicia son las que más interés muestran por esta posibilidad.
