llama mucho la atención que Marea Atlántica a lo largo de esta última legislatura no tomara nota de los errores cometidos mientras mantuvieron el poder de María Pita, con el sentimiento del ciudadano en general que fueron cuatro años perdios para la ciudad en muchos aspectos. Quisieron dejar su impronta, pero gobernar para unos pocos no suele traer buenas cosechas electorales. A la gente lo que le importa son los problemas cotidianos, no esforzarse en cosas como cambios de rúas, que se pudieron ir haciendo poco a poco, lo urgente siempre es el día a día de las personas: bienestar, limpieza, trabajo, seguridad, etc. En una palabra, gobiernos que se preocupen por la gente, por el conjunto, sin más. En los últimos cuatro años de la Marea tampoco parece que tuvieron excesiva repercusión como oposición y ello les dio poco rédito. Xan Xove llegó con un buen discurso, pero poco pudo hacer a la vista de la herencia de sus compañeros de viaje. Por otro lado, Sande (de la mano de Yolanda Díaz) tampoco logró ‘calar’ y eso podría pasarle factura para el proyecto Sumar.
