tener vehículo propio está penalizado en este país. A la Unión Europea se le da ahora por humanizar las ciudades y que los peatones utilicen el transporte público y alternativo (bicis, patinetes y otros). Y es verdad tener coche resulta ya un lujo, porque además del recibito del mes (si lo tienes a plazos) tienes que contar con garage (o establo, como diría Inés Rey), pero luego para aparcar es una odisea y si lo quieres hacer con cierta tranquilidad tendrás que sacar la tarjeta y entrar en un aparcamiento subterráneo, hacerlo en la zona de la hora o dejarlo mal estacionado con el riesgo de que te calcen un multazo de los buenos. En una palabra, tener coche es ahora un sacacuartos para las arcas del Estado y de los municipios. Luego nos extrañamos que las fábricas de los vehículos cierren y metan gente a engrosar el paro. Todo va contra el coche: cámaras para multar, controles de velocidad, etc. Ni un respiro, así que la gente se lo piensa mucho a la hora de tener vehículo. Echen cuentas.