la Unión Europea afrontará en los próximos meses nuevas rondas de negociación para cerrar acuerdos de libre comercio con el bloque Mercosur y Australia. La firma de estos acuerdos ampliaría enormemente la influencia de la Unión Europea en el comercio mundial, mejoraría su autonomía estratégica y resistencia económica, reduciría las desventajas competitivas con China y Estados Unidos en Latinoamérica y Oceanía, diversificaría las cadenas de suministro y ayudaría al cumplimiento de los ambiciosos objetivos de sostenibilidad europeos. En particular, Mercosur tiene un gran potencial para la producción y exportación de hidrógeno verde a precios competitivos y Europa es uno de sus principales mercados potenciales. En el caso de los países que conforman Mercosur, un acuerdo reduciría su dependencia de Estados Unidos, la influencia de China y abarataría el acceso por parte de los consumidores a los productos manufacturados en Europa.
