Será esta noche la primera vez que la Corporación de Vilanova se vea las caras desde que el alcalde, Gonzalo Durán, hizo públicas las imágenes de quienes intentaron quemar su casa. La falta de una condena rotunda de la oposición a aquellos hechos llevó al regidor a cortar toda relación con los demás grupos, especialmente con el PSOE. La tensión sigue, en lo que promete ser otro Pleno sin respuestas por un lado y sin una condena rotunda por el otro. El tiempo pasa: Para la investigación. Y para las próximas elecciones municipales, que están a la vuelta de la esquina. Veremos qué se cuece hoy.