La comarca de O Salnés se queda huérfana de uno de sus mejores embajadores. Ovidio Sanmartín, impulsor de la tradicional Danza de Cobas cuando corría el riesgo de desaparecer, nos ha dejado su legado para expandirlo ahora por el universo allá donde esté. Su recuerdo permanecerá para siempre en la memoria de los arousanos. Todos se acordarán de aquel hombre con una vara en la mano marcando los pasos y los puntos del resto de danzantes en las fiestas populares. Su presencia era señorial, elegante y desprendía un respeto ganado a base de trabajo duro y pasión por el baile. Bótalle outra peza, Ovidio.