Los acontecimientos se precipitan. Es cuestión de días que el Pleno de Ferrol, en sesión extraordinaria, tome partido sobre el convenio de Defensa. Para que a nadie se le olvide de qué estamos hablando, el Concello ha comenzado a despejar el aparcamiento del cuartel Sánchez Aguilera, un feo pórtico que recibe a quienes nos visitan en tren o en autobús y cuyo adecentamiento depende de que prospere el acuerdo de “marras”. Dicho queda: el convenio no va a solucionar los grandes males de Ferrol, pero rechazarlo por un regate en corto a unas semanas de las elecciones... Igual no se entiende.
