
La Costa da Morte vive con fervor los días principales de la Semana Santa, participando en las procesiones que vuelven a salir después de dos años sin hacerlo a causa de la pandemia del covid. Esta jornada de Jueves Santo ha destacado por la recuperación del tradicional Lavatorio de pies. Mañana será el turno para sacar a la calle los principales pasos de las cofradías de la comarca.
En Fisterra, los actos del Viernes Santo comenzarán a las 12.00 horas en la plaza de Santa Catalina con un Vía Cruces, al que seguirá el Santo Encontro que partirá de la Praza da Constitución, acompañado hasta la iglesia por la Banda de Santa cruz de Rivadulla y la Banda Arca-O Pino.
A las 20.00 horas será la liturgia y el acto de Desencravo de Xesús en la iglesia de Santa María das Areas. A continuación se celebrará la procesión de Santo Enterro, una de las más arraigadas en la tradición gallega y de mayor fervor en la Semana Santa de Fisterra, que recorrerá las calles hasta la madrugada. Estará acompañada por las bandas Arca-O Pino, Santa Cruz de Rivadulla y Desiderio Paz de Fisterra.
Otro de los lugares destacados de la Semana Santa en la zona es Carballo. La jornada comenzará a las 9.00 horas con el Vía Crucis. A las 19.30 se celebrará la Paixón y Adoración da Cruz. A las 21.00 horas será el turno para el inicio de la procesión con las imágenes del Santo Cristo da Mocidade, Santo Cristo da Milagrosa, Santo Enterro y Nosa Señora das Dores. Las cuatro cofradías recorrerán las calles de la localidad, acompañadas por la Banda Municipal de Música del Conservatorio carballés, que dirige Javier Bardanca.
En Laxe, los actos del Viernes Santo comenzarán desde bien temprano con el canto de la pasión a las seis de la madrugada, pasar seguir con la predicación y encuentro del Señor con la Virgen en la calle de la amargura. A las seis de la tarde se inician los oficios de la pasión y muerte del Señor, siguiendo con la procesión de los Caladiños y los versos a la Virgen Dolorosa. A las 23 horas será la procesión del Santo Entierro y Rosario de la Buena Muerte, un acto que se vive con especial intensidad en esta localidad. Como es habitual, los hombres delante y las mujeres detrás para cantar el Rosario de la Buena Muerte mientras recorren las calles.