El baile de los nos adscritos
Estas épocas veraniegas están generando una nueva fórmula de producir cambios sustanciales en las corporaciones municipales con las mociones de censura que se han presentado y triunfado en ayuntamientos en los que los concejales no adscritos jugaron un papel decisivos para que el nuevo alcalde o alcaldesa pudiera sujetar con sus manos el bastón de mando que le entregaba el que había sido derrotado por la suma aritmética de los que forman la mayoría.
Para mí la figura del tránsfuga y el no adscrito me trae muchos recuerdos periodísticos tanto a nivel nacional como autonómico que hicieron correr ríos de tinta impresa, voces sonoras lanzadas al aire, imágenes y opiniones de todo tipo en las redes sociales.
La lista de las mociones de censura que prosperaron, teniendo siempre como protagonistas a concejales no escritos, tuvieron su epicentro veraniego y fundamental en los municipios de Forcarei (Pontevedra), Noia (A Coruña), Touro (A Coruña) y Fisterra (A Coruña).
Recordemos que la definición referida al transfuguismo –genéricamente el que huye– señala que es la acción de un cargo electo que abandona el partido político por el cual fue elegido, ya sea para unirse a otro o para actuar como independiente. Los no adscritos, políticamente, son aquellos que fueron elegidos por una candidatura abandonan o son expulsados del grupo político por el que se presentaron. No forman parte del grupo mixto. Con sus acciones suelen intentar dar racionamientos de la decisión que nunca convencen a los que pierden el poder dentro del ámbito municipal. Para mí un gran porcentaje de ellas están relacionadas con el mal entendimiento y, sobre todo, por cuestiones de tipo personal. Este fenómeno se considera problemático porque puede socavar la voluntad de los votantes y la estabilidad de las instituciones políticas. Algo que se contempla en tres postulados: desestabilización de gobiernos; socavar la voluntad del electorado y desprestigio de la política.
Soy de los que creo que el Pacto Antitransfuguismo, acuerdo alcanzado entre partidos intentando promover la estabilidad institucional, no funciona.Los partidos políticos pueden llegar a acuerdos para rechazar a los tránsfugas y evitar que con su decisión puedan obtener una ventaja ellos mismos o a favor de terceros. Pienso que es necesario llevar a cabo reformas legislativas con las que limitar las tremendas consecuencias que pueden originar en instituciones que se nutren por elección. Algo que se puede hacer con la pérdida de cargos o la restricción de ciertos derechos. La transparencia es fundamental en todo este proceso lo mismo que los cargos electores rindan cuenta ante sus votantes que le otorgaron su confianza.
El baile de los no adscritos- que escogen concienzudamente sus parejas se está haciendo tan popular en este verano como las verbenas en las que con temperaturas elevadas los ciudadanos pueden disfrutar de las orquestas más afamadas que actúan en Galicia.