La docena de huevos camperos en la cita ferial celebrada ayer en Paiosaco se llegó a pagar a 6 euros
La presencia de la lluvia disminuyó la afluencia y la oferta de productos, entre los que destacaban 2 toneladas de patatas

Las temperaturas agradables de esta prolongación del estío y la coincidencia con la recogida de algunas cosechas, convierten a los recintos feriales en auténticos polos de atracción para vecinos llegados de distintos puntos de la Costa da Morte, pero también de su periferia.
Sin embargo, este domingo la feria de Paiosaco estuvo menos concurrida que otras veces al acusar la presencia de la lluvia.
La animación en el ‘campo da feira’ empezó a cuentagotas, aunque fue creciendo según avanzaba la mañana.
En el recinto predominan los productos de huerta con destacada presencia de cosecheros. Había menos de la habitual, algo que también se notaba en los puestos de artículos textiles y distribución alimentaria.
Con todo, destacaba la oferta de patatas, con alrededor de 2 toneladas y precios que oscilaban entre 1 y 2.50 euros por kilo. Las más caras volvió a ser la variante ‘fina’.
A pesar de la falta de precipitaciones de los últimos meses, también se observaba una destaca presencia de nabizas y grelos, que se vendían entre 2 y 3 euros el manojo; los repollos y la coliflor oscilaban entre los 2 y los 4 euros y, por kilo, se vendían a 2.5 euros.
El precio del tomate dependía de la variedad y empezaba en los 2 el kilo hasta alcanzar los 4.5 euros de la tipología más apreciada. El kilo de judías cotizaba de 3 a 5 euros y el de alubias, de 5 a 12 euros.
En cuanto a los productos de temporada, caso de las tradicionales castañas, el kilo iba de 3 y 5 euros; el de nueces, a 4 y 5 euros; el de manzana tabardilla y reineta, entre 2 y 3 euros; el de peras, a 2.5 euros; y el de ‘pexegos’ e higos, de 2 a 3 euros.
Los huevos también cotizan al alza y eso que todavía no llegó el frío, momento en el que la oferta se contrae debido a que las gallinas ponen menos. La docena de camperos se pagaba a 5 y 6 euros.
Por un bote de miel se solicitaban entre 9 y 12 euros, mientras el queso del país se vendía a 9 euros el kilo y, por piezas, de 5 a 12 euros.
En Paiosaco, a la sombra de la feria crecieron gran cantidad de negocios relacionados con sectores como el comercio, supermercados, panaderías y locales de hostelería.
Todos ellos vieron incrementadas ayer su promedio de ganancias de la semana, toda vez que muchas de las personas que acuden a la feria aprovechan para adquirir otros productos que necesitan para el hogar.
Cee y Baio
En la localidad marinera de Cee, también se respira un ambiente destacado cada día que hay feria.
Este domingo en O Recheo había menos puestos de lo habitual, sin duda por el mal tiempo.
Y como nunca llueve a gusto de todos, de ese orballo se beneficiaron los locales de hostelería y algunos comercios, que fueron ganando animación con el transcurrir de las horas.
Baio por su parte, es otra localidad de clara vocación comercial aunque, como en otras muchas, este sector no atraviesa por su mejor momento.
En la Praza Jorge Mira se dieron cita pocos puestos ambulantes, aunque algunos establecimientos hosteleros y comercios estaban más animados, sin duda por la iniciativa de dinamización comercial promovida por la Asociación Baión.
La clientela pudo optar así a interesantes descuentos en una zona outlet, sorteo de vales de compra, degustación de callos, regalos para las cien primeras compras, entre otros reclamos.